Le salió la bruja y la dejó en pena ¡Ahhh!
Quedé en quinta de ballet cuando el mesero Gustavo Porfirio, quien trabaja en un restaurante, en donde venden sushi, me contó que un famoso arrogante de diminuta estatura llegó con una tanda, pero tanda de amigos para comer y comer gratis, por lo menos eso fue lo que él pensó. ¿Adivinen qué? Cuando terminaron de comer él dijo que lo anotaran a su canje y el mesero dijo "No, ya no hay canje", por lo que el animador tuvo que meter su tarjetazo para poder pagar la inmensa cuenta. Todos sus amigos dijeron: "Patitas, pa' qué te tengo". ¡Pena!
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El raperito famoso y malagradecido
Bien reza un dicho: "cría cuervos y te sacarán los ojos". Oye, por ahí hay un raperito bien famosito ahora, así bien internacional y eso que ya se olvidó de la mano que le dio de comer y esa mano se lo está recordando. ¡Ah! Y la esposa de aquella mano también, porque se ha encargado de publicar - por todas sus redes sociales - indirectas para que el artista recapacite y no olvide al "viejo", quien le enseñó lo que sabe hoy. Mijo, no sea así, sea humilde, aunque sea regálele un suéter Gucci.
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El disfraz más pega'o del año
Aunque es un tema muy sensible entre una comunidad específica, hay una batita por ahí que sigue siendo la favorita pa' mañana que es la noche de Halloween. La tía Hilda me comentó que tiene un sobrino del otro bando que está pensando en entallarse una colorida que le quede bien, pero bien bonita pa' su gran noche. Y los collares no se quedarán atrás, bien representativos y eso. ¡Aunque les duela!